Época actual.
Se notan letreros de bienvenida a los alumnos de primer ingreso de la generación 2007 del CCH. Llega un grupo de chamacos y chamacas y entran a un aula donde hay un laboratorio.
Habla un profesor que va llegando:
-Buenas tardes soy el profesor Francisco, quiero que se presenten, además quiero que me digan si todos piensan sacar 6.
-Si, si, yo creo que sí (decididos), bueno... ya nos pusimos de acuerdo y cuatro de los que estamos aquí van a sacar ocho, dos nueve y uno diez; pero de una vez le avisamos que no vamos a aprender nada, ¡ja!, ¡faltaba más!, nunca hemos aprendido, ni siquiera distinguimos una mezcla de un compuesto ¿o es lo mismo?.
Un muchacho rezonga al fondo y dice:
- ¡como no!, yo si quiero aprender.
Termina el año, llegan chavos nuevos a un salón diferente con un profesor de matemáticas.
- Hola chavos, vamos a aprender mucho con las matem... no no y ¡no!, no nos vamos a ir, ¿como?, ustedes no van a llegar a nada, vámonos, digo, no nos vamos a ir, no, no le hagan, ustedes nada más vienen mientras se casan ¿eh...?
El profesor sigue hablando.
-No como creen, por lo menos vamos a ver ecuaciones de primer grado, no me jalen, (dice mientras sale del salón).
El profesor sale adelantado platicando tranquilamente con sus diez alumnos, unos atrás, como si fuera una práctica de campo. Como si fuera Aristòteles en el Liceo conversando de temas filosóficos con sus alumnos.
Los muchachos lo llevan del brazo respetuosamente, como si fueran a asistir a un banquete... y salen de escena.
-No me lleven, por favor (sin ninguna expresión en el rostro ni en la voz, casi como un robot), quiero que aprendaaaan..... (dice mientras repentinamente se va corriendo hacia la salida y sale de escena).
Los muchachos del bachillerato se hacen unos flojos, ¡ah!, pero para el quinto semestre llega una maestra que se ve que "no se anda con juegos".
-Bien chavos, aquí venimos a aprender, para empezar quiero que vayan a la biblioteca y me busquen estos aprendizajes, aunque ya los deben de saber, pero bueno, haber, quien desea participar... (largo silencio) ¿nadie? ¿No es este un CCH?
Al unísono y casi macabra mente, como máquinas:
-Siiii maestra ya vamos a sacar nuestro cuaderno para copiar al pizarron...
Se cierra el telón.
En este sketch intenté ilustrar porqué (no en todos los casos pero en el mío si), los profesores de primer grado te hacen trabajar pero no se preocupan por que aprendas mucho.
Los de segundo año del bachillerato ¡de plano!, apenas les dices "profe no de clase" y en la sílaba: "pr..." de la frase ya los tienes afuera del salón.
¡Aah! pero en el tercer año, todo el semestre parecen cursos intensivos, ahí si aprendes porque aprendes, los profes te traen como títeres, te usan como costales para llenarte de conocimientos, lo peor de todo (o mejor, pues es preferible comprenderlos tarde que nunca), es que hasta ahora comienzas a conocer los tres preceptos del colegio de ciencias y humanidades.
Cada quien posee una percepción diferente del bachillerato, aunque estoy consiente que nosotros hacemos la escuela,hay maestros que no poseen el don de mostrar a jóvenes y eso nos afecta a todos, un profesor que no le gusta su trabajo o que está ahí porque no encontró otro trabajo mejor, jamás va a ser un buen docente.
Este tipo de problemas nos corresponde cambiarlos a nosotros, mostrando interès aunque lo profes sean unos flojos.
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